Logros importantes

Martes, 11 de enero de 2011

Seré muy breve hoy, pues he tenido semanas muy complicadas, con mucho trabajo y mucho TOC, y como me tengo que esforzar el doble o triple de lo que se esfuerza una persona sin TOC para hacer algo sencillo como comer o dormir, es grande el consumo de energía mental y la fuerza de voluntad que debo poner para lograr los cambios de pensamiento y conducta, y ni hablar de los esfuerzos sobrehumanos para las cosas difíciles como estudiar o cumplir con las responsabilidades de mi trabajo y mi formación académica que son realmente exigentes, así que me siento cansado y no deseo intelectualizar mucho.

En la lucha contra el TOC voy muy bien, con grandes dificultades y también con grandes destellos de genialidad, lo más complejo en la aplicación del metaenfoque continúan siendo los mecanismo de defensa cognitivos y la resistencia biológica de los imperativos mentales propios de la sinapsis cerebral inusual. Lo fundamental en este momento en la lucha por liberarme del TOC y tomar control del cerebro en ese aspecto es adquirir la maestría en el dominio del metaenfoque para conquistar los cambios fisiológicos requeridos en pro de la liberación.

He descubierto que la efebofilia más allá de ser para mí un problema producto de un vacío afectivo, es en realidad un tipo de obsesión emocional relacionada con el sentido de simetría mental, por lo tanto se puede decir que es una obsesión pura-nuclear de hipercontrol y perfeccionismo, hablo de mi caso particular, pues es muy poco común encontrar este tipo de etiología. 

Como táctica de combate es necesario, en primer lugar, reducir su carácter controlador y predominante sobre las reacciones emocionales, con esta reducción obsesiva es más sencillo trabajar sobre la afectividad por medio de terapia psicodinámica, aunque también es cierto que el mismo estrés que causan los vacíos emocionales y frustraciones afectivas es un generador imparable de obsesiones e impulsos compulsivos, así que se pude apreciar que la génesis de las obsesiones afectivas en el TOC y los problemas obsesivo-compulsivos de bajo espectro (neurosis obsesiva, trastorno de la personalidad obsesivo-compulsivo, trastorno dismórfico corporal, tricotilomanía, trastornos alimentarios...) parten de una situación ambigua que se interrelaciona en un sentido directo e inverso, de ida y vuelta, de acción-reacción.

Esta ficha me recordó que desde 2007 trabajé muy duro en superar el problema de la baja autoestima condicionado enormemente por la presencia del TOC, y que pude hacer realidad ese sueño, de ser una persona con seguridad en si mismo y con una confianza muy amplia en sus propias capacidades, pude liberarme de los complejos de inferioridad y aprendí a sentir mucho cariño por mi propia persona, y gran orgullo de todos mis logros, aprendí a usar el sufrimiento y las duras pruebas de la vida en una fuerza constructora para pulir mi personalidad y acrecentar mis fortalezas; también me he vuelto una persona muy autónoma e independiente en los procesos de la vida , pese a tener la batalla constante y sin tregua contra el TOC.

Para mejorar mi autoestima tuve que estudiar mucho y ser muy observador, practicar y practicar, y buscar las situaciones que me permitieran poner a prueba mis autocreencias para conseguir los cambios profundos necesarios, todo el proceso de reestructuración mental y existencial tuvo como soporte la terapia cognitivo-conductual, la PNL, la risoterapia y los procesos psicodinámicos de interacción.

El camino de la autoestima es largo y gradual, es un proceso que nunca termina porque el crecimiento personal es infinito, así como el mejoramiento de la conducta y las propias creencias personales. Como lo afirmé en la ficha, aún tengo que seguir mejorando y trabajando en incrementar mi sentido de autoestima y el equilibrio emocional. Sin duda que llegaré muy, muy lejos en esa aventura y en todas las que estén por venir, para mi propio bien y el bienestar de mis hermanos.