La importancia de triunfar en la vida





Miércoles, 12 de marzo de 2008




Esta ha sido una semana decisiva en mi vida, han transcurrido acontecimientos que le han dado un giro drástico a las cosas y que me han puesto en un estado de alerta permanente.

Tengo que hacerme responsable de mi vida y buscar los medios para resolver los problemas por mí mismo sin esperar que los otros me los resuelvan, me ha tocado tomar el camino difícil y comenzar desde cero, ahora todo depende de mí, estoy solo y las decisiones van a ser transcendentales. Ha llegado la hora de dejar de ser cobarde, de confiar plenamente en mí, de pedir ayuda con humildad y de lanzarme sin miedo en la conquista de mis sueños y objetivos.


Esta semana perdí mi empleo, me quedé sin internet y tuve que olvidarme de ciertos planes en los que pensaba que contaría con la colaboración de mi mejor amigo. En este momento todo es una cuestión de supervivencia y una lucha contra el tiempo.


Ayer tuve una charla interesante con mi mejor amigo en la que me expuso su posición respecto a mis proyectos financieros y en la que me dio su sincera opinión sobre mi persona.

La conversación fue muy fuerte, hubo cosas que me dolieron mucho, cosas verdaderas que me negué a aceptar por mucho tiempo y que finalmente alguien tuvo el valor de decirme de frente y sin anestesia. Mantuve la compostura y escuché con atención, también me defendí en varios puntos y presenté mis argumentos, pero de poco sirvieron ya que eran solo excusas para autojustificar mi actitud pasiva y temerosa de la vida.

Aunque acepto que no puedo ser tan severo conmigo, hay muchas cosas que minimizan mi responsabilidad, tampoco se me orientó en cómo vencer cierto tipo de dificultades, es cierto que me dejé ahogar en varios momentos, pero ahora estoy luchando con firmeza, a veces no cae mal que las personas nos den duros sacudonazos.


De esa conversación sólo quiero rescatar algunos puntos que me tocaron profundamente, no deseo entrar en detalles. Mi amigo no quiso herirme, creo que usó un esquema de psicología inversa con el que pretendió utilizar mi ira para armarme de coraje y de esa forma motivarme a buscar formas para hacerle retractarse de todo lo que me dijo. Lo siguiente es lo más relevante:
  • No estoy viviendo como un adulto en el presente, soy un niño miedoso que le tiene pavor a los problemas reales de la vida..., puedo ser muy listo en muchos aspectos de la existencia y maduro en ello, pero en la cuestión de salir adelante, de emprender, de triunfar por mis propios medios... me he quedado rezagado, esperando que los demás hagan por mí, busquen por mí y piensen por mí (Todo esto aplica principalmente a la parte económica, pues en muchas otras áreas soy exitoso, no quiero sobregeneralizar ni menospreciarme).
  • Mi inteligencia práctica está poco desarrollada; me falta empuje, decisión, valentía y seguridad personal para creer en mi propio poder y capacidad (He vivido en una realidad abstracta, huyendo de aquello que me estresa; acepto que he estado mentalmente enfermo, con problemas delicados que me han incapacitado..., esa es mi excusa de siempre, pero es real lo que me pasa y me pasó, siempre he querido triunfar, más no he sido capaz).
  • Recibí la etiqueta de perdedor, dormido, aplazador del presente, dependiente y falto de creatividad.
  • Las capacidades que he desarrollado poco me sirven en el sagaz y competido mundo de los negocios.
  • No puedo excusarme con las enfermedades mentales y la baja autoestima, pues cuando una persona desea triunfar no se rinde ante nada, y si ve que no puede pasar por encima de los problemas, entonces pasa por debajo (Creo que se refería a sobreponerse).
  • Me he concentrado en terapias y procedimientos sistemáticos de larga duración para superar los problemas dejando de lado la confrontación directa inmediata, he presentado una actitud típicamente evasiva.
  • La actitud de esperar de los otros y de hacerles sentir que tienen obligaciones conmigo nunca me va a permitir caerle bien a la gente, a las personas no les gusta que los otros siempre les estén hablando de problemas, pues un triunfandor sólo se rodea de voces positivas y de gente optimista.


Mi amigo no conoce mucho de la mecánica de ciertos trastornos psicológicos, desconoce la realidad interior de la vida de una persona con TOC, AMS, baja autoestima y problemas de personalidad dependiente y obsesiva. Creo que no comprende ciertas debilidades y problemas humanos que son difíciles de entender, pero tiene una capacidad muy objetiva para detectar el infantilismo, subrayar los defectos de carácter y las desventajas de ciertos tipos de temperamento.


La cuestión es que yo no me he propuesto ser así, no me he quedado estancado por gusto, simplemente no he podido llenar las expectativas de los otros y salir por mí mismo de tantos atolladeros, muchos retos han superado mi fuerza y capacidad, pero esa situación la puedo cambiar si me lo propongo. Lo que importa es que ahora voy a demostrarle al mundo que no soy un perdedor y que puedo llegar más allá de los sueños.


Esta semana he aprendido muchas cosas sobre relajación mental; he estado estudiando técnicas para conseguir el estado alfa, que es la condición cerebral de receptividad y calma en la que afloran la creatividad, la agilidad mental y las soluciones inusuales. He aprendido el uso de las asociaciones numéricas decrecientes, el método 3-2-1 y los mandalas.


No pude subir las fichas la semana pasada, confío que podré en esta.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Historias de personas homosexuales: TOM - UN HOMBRE CASADO

Cuestionario anamnesis psicológica

Historias de personas homosexuales: ALBERT- EL PEQUEÑO NIÑO INTERIOR