Generalidades del Trastorno Obsesivo Compulsivo (T.O.C.)
Lunes, 14 de febrero de 2010
El tema de la soledad tiene bastantes implicaciones en
mi vida porque quiero conseguir ese equilibrio entre soledad y compañía,
situación que me permitirá mantener a raya las embestidas del instinto gregario.
Definitivamente me gustaría tener intimidad emocional con otro ser humano, hace
tiempo conocí esa experiencia a través de mi examigo el Señor Herberth cuya
traición y deslealtad me convirtió en una persona muy prevenida y con poco
interés en mostrar mi intimidad a alguien
más.
He perdonado lo
que él me hizo y estoy nuevamente dispuesto a asumir los riesgos de abrirse a
los demás en la intimidad emocional, es algo muy placentero y edificante, por
eso decidí permitirme una nueva oportunidad y todas las que vengan, sólo que
esta vez seré más precavido e iré con más lentitud antes de regalarle mi
confianza y amistad verdadera a otro ser
humano.
Con respecto a
la amistad he aprendido, que esta es muy necesaria para la curación emocional y
para hacer de la vida una experiencia más gratificante.
Me gustaría tener amigos, espero conseguirlos algún día,
en este momento solo cuento con compañeros y amistades superficiales, y no es
algo que minusvaloro, porque todas esas personas de mi facultad y de mi trabajo
son gente valiosa con la que he trabajado excelentemente, sin embargo, ninguno
de ellos me brinda la posibilidad de una amistad verdadera y real, carente de
dependencias y sin tener que renunciar a mis valores e ideales de
vida.
Para ganarme un amigo verdadero estoy
dispuesto a sacrificar lo que sea necesario, porque muy cierto es el dicho que
“quien encuentra a un verdadero amigo ha hallado un tesoro más valioso que todo
el oro del mundo”. En verdad que anhelo de corazón tener la oportunidad de
conocer en esta vida a una persona así, con esas características y
grandeza.
También
necesito resolver la efebofilia a través de la amistad, específicamente a través
de la relación y cercanía constante con adolescentes u otros hombres jóvenes, y
eso es debido a que ese problema emocional es mi principal activador interno y
permanente del mecanismo TOC.
El TOC es una
anomalía de la habilidad cerebral avanzada de comprender y resolver problemas,
de la segmentación de las estructuras que componen la realidad del pensamiento y
la inteligencia; experimento la efebofilia como ese problema no resuelto de
mayor intensidad y que consecuentemente refuerza la estructura disfuncional del
cerebro. En verdad que necesito salir de eso pronto, espero encontrar amigos
para eso.
Otra opción es
emplear la hipnoterapia para insertar recuerdos y experiencias falsas en la
memoria que contrarresten los traumas y cancelen los vacíos emocionales. De este
tema se muy poco, y no estoy seguro si funcione al
100%.
Quiero
compartirles algo que le escribí a otro TOCado (persona con TOC – denominación
coloquial) y que me parece muy digno de anexar a mi blog y compartir con el
mundo; sintetiza mi visión general del problema. Espero que algún día mis
escritos y experiencias personales en materia de TOC estén al alcance de todo el
mundo y de quien más lo
necesite.
GENERALIDADES DEL
T.O.C
Sin duda que la
vida parece muy injusta cuando te ha tocado vivir y combatir el TOC, de entre
todos los problemas que existen, éste ocupa un lugar privilegiado en la lista de
lo más difícil de entre todo lo
difícil.
Y así como este
es un problema de gran complejidad, los que lo combatimos y lo soportamos, somos
a la vez las personas más valientes y más fuertes de todo el mundo. Somos los
particulares guerreros de la mente revestidos de gran paciencia, autodominio,
tolerancia y enorme
perseverancia.
El sufrimiento
siempre es algo molesto, siempre aspiramos a una vida mejor y mantenemos vivo un
ideal de una existencia plena, sin sufrimientos y de puro gozo interior y
exterior; pero olvidamos muchas veces, que el sufrimiento es el único vehículo
que realmente nos puede enseñar las verdades de la vida, porque todo sufrimiento
comprendido, bien vivido y proyectado hacia su superación, encierra sabiduría y
la oportunidad de ser mejor persona en muchos
campos.
En esta existencia no podemos escapar del
sufrimiento, ni de la muerte como tampoco del destino, entendido este último
como un objetivo supremo que guía la vida de cada persona en singular, algo así
como una misión que su existencia misma le ha trazado con el libre albedrío de
aceptarla o de rechazarla.
He vivido pocos
años, pero la intensidad de mi lucha y mis particulares habilidades me han
permitido conocer al TOC como pocas personas lo han conseguido en la vida, eso
es bueno por un lado, pero también muy problemático por el otro, cuando sabes
mucho tu responsabilidad crece y por ende el nivel de autoexigencia muy presente
en las realidades obsesivas.
Hay mucha gente que ha escrito docenas de
libros o dan conferencias declarándose completamente "curados" del TOC, pero si
uno mira con detenimiento y con el buen ojo de un guerrero TOC, notará que todo
se basa en sistemas de control, y que la extinción de las
obsesiones-compulsiones puras como tales, no se ha producido realmente, sino que
han adquirido herramientas para mantenerlas confinadas, y cuando logran
escaparse por un momento, ellos suelen experimentar las famosas "recaídas" de
los tiempos después de la "curación", también hay otros que supuestamente se han
"curado" de un TOC severo, cuando en verdad se trata de un TOC leve o moderado,
en donde las obsesiones son más fáciles de superar.
La curación de un TOC implica la desaparición absoluta de
las obsesiones-compulsiones puras, y hasta el momento, eso no ha pasado en la
vida de alguien cuya reputación y resultados no hayan sido
cuestionados.
Esto no significa que yo sea el experto número uno del
planeta en materia de TOC, pero es un hecho que estoy entre los mejores y entre
los primeros. Además no existe un experto y autoridad suprema en materia de TOC
en este momento. Todas las investigaciones que se hacen sobre el TOC tienen
validez, pero es nuestro deber legitimizarlas y desde un enfoque crítico muy
personal, aceptarlas o no, nadie tiene la verdad absoluta, no hay verdades
absolutas, en la vida todo es relativo y cambiante, una posible verdad puede
convertirse en una teoría con el paso de los años o de los siglos gracias al
descubrimiento de otra nueva "verdad" que la anula, por lo tanto, en la
realidad, todo es verdaderamente teórico.
El mundo del TOC sigue siendo
uno de los mayores misterios de la mente, y su entendimiento y estudio sigue
siendo limitado, ese problema es como un virus mental similar al VIH, siempre
está mutando, cambiando, y desafiando todas las supuestas curas; lo que funciona
realmente es la metodología del control paulatino del cerebro, que con el paso
de los años sin duda puede acercarse a la verdadera extinción del problema. A
futuro, la verdadera cura significa estar libre de toda forma de
recaídas.
Cuando hablamos del TOC hay un mecanismo biológico de por
medio, porque ya no se trata de algo psicológico, sino de un evento inusual en
el cerebro, eso se evidencia en los automatismos cognitivos y conductuales, en
que se experimenta como necesidad fisiológica, como una urgencia no clara, como
un imperativo u orden neurológica que escapa del control de la conciencia y la
voluntad; su equivalente se asemeja a las necesidades biológicas de otro tipo,
que llegan al pensamiento sin que se les llame, y se experimentan como asuntos
de "vida o muerte", muchas veces no tan claras, como en el caso de las
necesidades emocionales, pero otras, caso contrario, como la necesidad de
alimentación o reposo.
Las necesidades biológicas están íntimamente
unidas a la sensación de ansiedad, y su no satisfacción se experimenta a través
del estrés. En el TOC existe un componente ambiental (activador), un componente
psicológico (creencias, cogniciones, trastorno de personalidad
obsesivo-compulsivo, rasgos obsesivos), y el componente biológico
(funcionamiento inusual del cerebro), siendo este último la esencia, origen y
sostén del TOC.
Los problemas,
inferencias y estructuralismos del razonamiento TOC no forman parte de la esfera
emocional, son meramente de orden cognitivo, y su componente genérico es de
origen e interpretación matemática; he ahí la necesidad simétrica, conteos,
repeticiones, exactitud, lógica, absolutismo…
Se nace con ese mecanismo en el cerebro, forma parte de
esas mutaciones positivas o alteraciones genéticas que entran en vigencia
durante la gestación y que conllevan a la presencia y desarrollo de habilidades
cerebrales avanzadas múltiples y específicas que derivan en capacidades mentales
extraordinarias o en el desarrollo de ciertas conexiones neuronales que
predisponen hacia la genialidad; todas las grandes mentes, según su capacidad
central eje, tienen que soportar el efecto secundario de estas mismas, siendo el
TOC uno de esos tantos, que erróneamente muchos científicos han confundido con
enfermedades mentales o "excentricidades".
El factor psicológico está
presente en la dinámica del TOC, existe un profundo sentido de la
responsabilidad y una conexión especial con el intelecto y el conocimiento, al
hablar de aspecto psicológico hay que remitirse al contenido de las diferentes
clases de obsesiones.
En la parte ambiental, se cuentan los factores externos que
desencadenan el TOC y que obligan al sujeto a responder en clave de compulsión.
Y en la parte biológica, esta el imperativo fisiológico de necesidad inevitable
e inconsciente reiterativa y dominante. Por lo general, en un caso inicial o TOC
leve no es fácil reconocer los elementos obsesivo-compulsivos presentes, pues
estas cosas son expertas en camuflaje, y se activan progresivamente con el paso
de los años, además la mayor parte del TOC es un problema de nivel puro, en
donde casi todo es encubierto.
La neurosis obsesiva o la neurosis
obsesivo-compulsiva es tan sólo un problema psicológico relacionado con casos de
traumatología psíquica o adicciones, no hay elementos matemáticos de por medio,
y todo es muy emocional, no hay mecanismos biológicos ahí. No controlan a la
persona en aspectos irracionales o faltos de sentido común, se centran en
secuencias repetitivas con un orden lógico.
Los rasgos obsesivos son
simples formas de carácter, como ser muy meticuloso u ordenado... eso es muy
común en la gente y no contempla problema. Los mismo pasa con rasgos compulsivos
no patológicos como contar las cosas, o tener tendencia a ser muy comprobador,
pero es algo normal.
El trastorno de personalidad obsesivo-compulsivo es
una derivación patológica de los rasgos obsesivos o compulsivos, es una
tendencia marcada que sobresale en la personalidad del sujeto, lo lleva hacia el
terreno del perfeccionismo y el aislamiento, lo que degenera en problemas
emocionales y neurosis.
La experiencia me ha enseñado que el tratamiento
se debe centrar en el aspecto biológico, mientras exista éste con amplia fuerza,
es muy difícil lograr cambios en los otros terrenos.
En la lucha del TOC, uno suele estar muy sólo, dado lo
complejo que es, y el poco entendimiento que existe al respecto, a veces
relacionarse con los otras personas con TOC es un problema, te encuentras con un
infinito océano de contradicciones y muy poco apoyo moral, a veces eres
afortunado y conoces a personas con TOC que no tienen depresión y que luchan con
optimismo a pesar de lo terrible que es todo eso; yo guardo un profundo cariño
por mis compañeros TOC, porque se lo que se siente y comprendo perfectamente sus
sufrimientos y frustraciones; mi labor es animar a mis compañeros y compartir
todas las cosas que descubro a lo largo de esta batalla.
Por eso, es muy fundamental que comprendamos, que aunque no
encontremos mucho apoyo con lo del TOC, porque es algo muy mental, te tienes a
ti mismo, que es lo más importante, estoy seguro, que toda ayuda real y
bienintencionada es siempre bienvenida, no hay que esperar mucho de la gente, ni
tampoco esperar que nosotros resolvamos todos los problemas del
mundo.
Otro indicador fundamental para medir la presencia y el grado del
TOC es el NIVEL DE INCAPACIDAD que se manifiesta en problemas para llevar una
vida "normal" y operar con eficiencia en las tareas sencillas del diario vivir
como comer, estudiar, trabajar, socializar, crear, sobrevivir... generalmente,
quienes tenemos TOC tenemos que esforzarnos mucho más que cualquier otra persona
para seguir adelante y responder a las demandas de nuestro entorno.
El dolor es el pan de cada día, y el sufrimiento es algo
que siempre está presente, y al que hay que aceptar con serenidad y con sentido,
con el compromiso de vencer y tener una mejor vida sin importar lo que cueste y
el tiempo que cueste.
Cuando uno comienza la edad adulta se intensifica
la verdadera lucha con el TOC, él está presente desde que uno es niño, sólo que
suele activarse en ciertos momentos claves de la vida en lo que se necesitan
respuestas y no las encuentras, y en los que la sensación de responsabilidad se
torna muy alta.
El sentido de responsabilidad excesivo configura la
obsesión madre de la hiperresponsabilidad, este es el mecanismo cognitivo básico
del que proceden todos los demás espectros de obsesiones tipo TOC. El ambiente
externo conflictivo, de alta competencia, de exigencia y de altas expectativas
es ese factor que activa el mecanismo TOC por temporadas o
permanentemente.
Por lo general, en la vida de las personas con TOC, la
transición de niño a adulto es un factor desencadenante del mecanismo, el paso a
la adultez implica mucha responsabilidad y autonomía, y una necesidad de
soluciones para manejar problemas y responder a las dificultades emergentes, esa
transición tiene un alto impacto en la genésis de obsesiones y compulsiones tipo
TOC muy claras y evidentes.
Quienes tenemos TOC contamos con un mecanismo
cerebral avanzado para la comprensión y resolución de problemas, que
eventualmente colapsa por el exceso de tensión existencial y un grado desmedido
de responsabilidad, originándose una tendencia biológica de retroacción que se
alimenta en un círculo infinito de una necesidad imperativa de respuestas y
soluciones.
Esa traumatología existencial reiterativa es lo que origina
la falla en el cerebro que se conoce como TOC, o efecto secundario de
habilidades cerebrales descontroladas por acción del estrés como respuesta ante
la dificultad de obtener soluciones prácticas a problemas específicos.
La
sensación de no tener una respuesta a un problema o de no tener los medios y
herramientas necesarias para superarlo hacen que la capacidad del cerebro se
exceda y se desproporcione en ese movimiento giratorio del TOC en busca de más y
más respuestas.
Son precisamente ciertos eventos de la vida los que
determinan la aparición de los tipos de obsesiones y compulsiones específicas,
son esos problemas que parecen no tener solución o que son de difícil manejo los
que hacen que el cerebro se reinicie una y otra vez, y son los que gradualmente
lo incapacitan a uno. Para vencerlos uno tiene que hacer exactamente lo
contrario y aprender a engañar a la mente.
En el TOC cualquier ataque directo es devuelto en nuestra
contra, para ganar es necesario perder... es muy irónico, pero las paradojas de
la vida y la rendición total encubierta son los mejores principios de la lucha
TOC; igualmente la meta mayor en relación con el TOC, es lograr hacer cambios de
pensamiento y conducta, es decir, cambios inmediatos que en otras personas son
automáticos, y que en el caso de los TOCados (personas con TOC), se convierten
en tareas manuales con implicación de la voluntad para lograr vivir y mantenerse
activo en el medio y en las acciones del día a día previniendo la incapacidad y
la parálisis psicofísica que caracterizan al TOC.
Cualquier procedimiento
o técnica ha de ser ejecutado de manera encubierta, pues es algo así, como que
el TOC tiene mente y vida propia, y hay que engañarlo sin que el se de cuenta,
hay que hacer cosas que el no pueda descifrar, estructurar ni analizar; con el
TOC es algo así como que alguien más vive en tu cabeza y que intenta controlarte
y eliminarte.
Estoy implementando el metaenfoque en forma encubierta,
ejecutando cambios de pensamiento espontáneos y naturales. Lo más complicado son
las llamadas obsesiones puras, pues se mezclan con la razón y la visión de
problemas reales que un ojo ordinario no puede ver ni deducir.
En
fin, el “maravilloso” mundo del TOC es un desierto lleno de monstruos, oasis,
espejismos, arenas movedizas y un “bellísimo” clima infernal... pero, es también
la mayor oportunidad para aprender a amar y valorar la vida; el mundo del TOC te
enseña a ser paciente, a perseverar, a forjar un carácter de guerrero
invencible, te proyecta a una mayor felicidad, te enseña humildad y te hace
explorar las profundidades de la mente y la razón.
Por irónico y paradójico que parezca, estoy seguro que
algún día nos sentiremos agradecidos con el TOC, e incluso lo recordaremos como
un viejo amigo que nos puso la vida de cuadritos y que también sacó a flote lo
mejor de nosotros mismos.
Excelente síntesis te invito a ingresar a www.comprenderysanar.com un abrazo!
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