La relación con los demás
Miércoles, 09 de julio de 2008
FICHA
2. 10
1. TEMA DE LA FICHA: LA RELACION CON LOS DEMÁS
2. OBJETIVOS A CONSEGUIR:
a.
Reconocer los sentimientos de inferioridad con respecto a tu propio sexo
b.
Comprender la importancia de una actitud activa frente a las relaciones
sociales
c.
Reconocer las faltas de perdón y hacer un esfuerzo por perdonar como parte de
la liberación del ego infantil.
3. DOCUMENTO A TRABAJAR:
DOCUMENTO 2:
REGLAS PRÁCTICAS PARA LA (AUTO) TERAPIA.
Gerard J. M. van den Aardweg
CAPÍTULO: LA RELACION CON LOS DEMÁS
SUBCAPÍTULOS: Cambiar la propia visión de los demás y la relación con ellos
Amistad
Padres
Cambiar las relaciones con el sexo
opuesto; matrimonio
4. ARTÍCULO FUNDAMENTAL A LEER PARA
PROFUNDIZAR ESTE TEMA.
a. Tipos de amistad para los que luchan con la homosexualidad, por J. Nicolosi, en:
5. PREGUNTAS A REFLEXIONAR, TRABAJAR Y
RESPONDER EN EL CUADERNO DE TRABAJO EN TORNO A TODO LO LEÍDO:
a.
Escribe las ideas fundamentales que has encontrado en este capítulo y haz una
pequeña reflexión de cada una de ellas en relación a cómo influyen o han
influido en tu vida.
- El neurótico homosexual
ve a los demás, en parte, como un “niño”. Cambiar la homosexualidad es
casi imposible sin alcanzar, en definitiva, una visión más madura de los
demás y una relación con ellos más adulta.
Este es el aspecto crucial de la
curación de la neurosis, he procurado crecer y superar mi infantilismo en toda
su extensión, estoy orgulloso de los logros alcanzados y voy a por el premio
mayor.
- El homosexual debe
reconocer los sentimientos de inferioridad y de vergüenza con respecto a
los otros del mismo sexo, que están implícitos en la idea de “no
pertenecer”.
Estos sentimientos emergen en
presencia de adolescentes, antes sentía miedo, ahora me siento más seguro de mi
mismo y de mi propia capacidad.
- Construir amistades
normales, “invirtiendo” interés en el otro y no principalmente para
“conseguir algo a cambio”, estimula el proceso de maduración emocional.
Además, disfrutar de amistades normales con otros del mismo sexo puede
estimular el crecimiento de la identificación de género; más aún,
contrarresta las quejas de soledad, que pueden ser un fácil acicate para
las reacciones de auto-consuelo en la fantasía homosexual.
Tuve un amigo durante muchos años, a quien
consideré un confidente, esa fue una experiencia maravillosa, pues era la primera
vez que le confiaba a alguien los secretos más profundos de mi vida, esa fue
una de las mejores vivencias de maduración emocional que he tenido, sin
embargo, me tomó mucho tiempo pasar del "ámbito de interés
egocéntrico", al de "donación y verdadero aprecio". A pesar de
que ya no somos tan unidos, íntimos ni confidentes, le tengo un gran aprecio y
un cariño real de hermano, he procurado superar los resentimientos para no
quedarme estancado en el camino.
- Los hombres homosexuales
pueden considerar a hombres mayores como si fueran sus padres ─ temer su
autoridad, ser demasiado sumisos con ellos, buscar su protección, tratar
de complacerlos o rebelarse interiormente ante ellos.
A los hombres mayores los veo como
"iguales", no me siento intimidado y actúo con seguridad.
- Un método de gran
eficacia en la lucha para hacer que la propia relación con los padres sea
normal es el perdón. A menudo, uno no puede perdonar del todo. Sin
embargo, puede decidir perdonar instantáneamente en una situación
concreta, por ejemplo, en el momento en que uno está pensando sobre
ciertas actitudes y conductas de los propios padres. Perdonar es a veces
un combate, pero normalmente proporciona alivio y remueve los bloqueos del
sentimiento normal y más afectuoso hacia los propios padres.
Esta tarea la he hecho práctica en
la relación con mi mamá... ya no siento el resentimiento del niño interior, me
siento feliz de que ella sea mi madre y soy un hijo orgulloso.
- Convertirse en un hombre
significa ser capaz de responsabilizarse de una mujer y saberla
“conducir”. Significa no dejarse dominar o ser conducido por una
mujer-madre, sino, cuando es preciso, conducir a una mujer y tomar
decisiones por ella.
Mi madre nunca controló mi vida,
respeté su autoridad, más siempre fui muy autónomo; nunca me sentí controlado
por ella o coaccionadas mis decisiones.
- Los sentimientos
heterosexuales aparecen sólo tras los sentimientos restaurados de
masculinidad y feminidad. No debería tratarse de un “entrenamiento” en
heterosexualidad ya que esto profundizaría en cambio la imagen interna:
“tengo que demostrar mi masculinidad (o feminidad)”.
Mi meta nunca ha sido
"enamorarme", ni formar familia ni procrear; siempre me han
acompañado los sentimientos heterosexuales, simplemente los he ignorado por
considerarlos imprácticos en mi proyecto de vida. Quiero superar mi AMS para
gozar de mayor libertad interior y salud psicológica.
b. ¿Cómo te sientes con personas de tu mismo sexo?
Me
siento muy a gusto en compañía de otros hombres, atesoro cada momento que
comparto al lado de mis iguales de género. He notado que experimento más cariño
hacia los hombres que hacia las mujeres, pero también profeso un gran afecto
por el género femenino.
Tengo especial y fuerte interés por los hombres adolescentes, ellos son las
personas por quienes me siento más atraído emocionalmente, cuando estoy con
ellos percibo sensaciones muy intensas en mis entrañas y como cierta
fascinación.
No suelo experimentar esa emocionalidad tan intensa respecto a los mayores de
edad, excepto si existe de por medio un vínculo afectivo sólido, una gran
amistad o mucha afinidad de intereses.
Solía erotizar a los chicos adolescentes, y todavía me pasa en ciertas
circunstancias, pero no es muy usual, ya que he debilitado el interés
homosexual y desexualizado la necesidad afectiva primaria; cuando me pasa, sólo
se trata de una reacción inconsciente habitual activada por el estrés o la
ansiedad.
c. ¿Cómo te sientes al enfrentarte a grupos de tu mismo sexo?
En
grupos de adultos me siento tranquilo, al principio experimento la tensión
normal que surge cuando se está en medio de desconocidos, pero luego pasa y
entro en confianza ganando seguridad personal.
En
grupos de adolescentes actúo con miedo y un poco inhibido al principio, a veces
afloran algunos sentimientos de inferioridad respecto a la masculinidad, o
percibo a los chicos como amenazas, pero después de un rato rechazo esos
pensamientos neuróticos y entro en confianza, cuando he ganado seguridad paso a
un estado de euforia.
Con
los adolescentes adopto un pensamiento más abierto y actúo como ellos, reduzco
mi nivel cultural y mi lenguaje muy inteligente, también cambio un poco mi
rigor y seriedad de adulto dando paso a expresiones más juveniles y actitudes
más divertidas; me gusta aprovechar mi apariencia física para facilitar la
interacción, recordando siempre mis objetivos curativos y a mi niño interior.
d. ¿Qué te preocupa al
integrarte en un grupo?
Ante
todo busco personas con las cuales sea compatible y con las que exista
posibilidad de edificar una amistad sana y verdadera. En este caso, soy muy
expresivo y procuro crear un clima de confianza para que nazca la intimidad,
respeto mucho las diferencias de los demás, sus convicciones y formas de
pensar.
En
grupos de paso y con contactos ocasionales, mantengo una posición prudente, ya
no suelo ser tan desconfiado y prevenido, actúo con autenticidad y soy abierto
a la amistad; no busco integrarme con personas con las que existe ninguna
afinidad o que tienen formas de pensar que son inaceptables para mí, a estos
individuos los trato con respeto y cortesía, y sólo discuto con ellos asuntos
superficiales de mi vida personal.
e. ¿Qué haces por lograr una
relación madura con tus padres?
A
mi padre no lo conozco, jamás he tenido contacto con él, él me negó antes de mi
nacimiento y se desapareció; me gustaría conocerlo, pero no deseo construir un
vínculo afectivo con él, por autorrespeto, jamás podría verlo como mi padre,
sólo podría llegar a tratarlo como un amigo... no hay razón valedera que
justifique su total abandono y rechazo, no lo odio porque no lo conozco y
porque no me siento herido realmente pues nunca hemos tenido contacto; lo que
hizo estuvo muy mal, pero tiene mi perdón.
Con
mi madre tengo una relación muy madura, nos queremos mucho, ella me trata como
el adulto que soy y me manifiesta siempre su cariño y preocupación maternal,
Respeta mis decisiones, espacios y nunca trata de controlarme o imponerme su
voluntad.
f. ¿De qué personas te haces dependiente afectivamente?
De
ninguna persona. Alguna vez tuve cierta dependencia afectiva con un amigo
virtual con quien me involucré en un nivel emocional muy profundo, pero esa
actitud fue reforzada principalmente por mi TOC, por aquellas creencias falsas
de culpabilidad y excesivo sentido de responsabilidad-solidaridad respecto a
los problemas de los demás; también intervino mi inseguridad personal.
Otro
tipo de dependencia fue la que sostuve con el Señor H., pues llegue a poner mi
éxito económico en sus manos debido a que me sentía incapaz de lograr triunfar
en la vida sin su ayuda.
Conozco
muy bien el significado de la interdependencia y la autonomía, así que cuido de
vivir mi vida y luchar por mis metas, y trabajo en equipo para obtener mejores
resultados, también para contribuir en los proyectos de los demás; aunque sé
muy bien que el éxito sólo me corresponde alcanzarlo a mí, y sólo yo puedo
hacer realidad mis sueños. El cariño genuino no es lo mismo que el apego insano
y controlador.
6. PROPUESTA DE EJERCICIOS PRÁCTICOS A REALIZAR PARA LLEVARLO A LA
VIDA COTIDIANA. ESCRIBE LAS CONCLUSIONES DE ESTOS EJERCICIOS EN TU CUADERNO.
a. Si te atrae un amigo
intenta negarte a las fantasías con él y míralo con sus defectos y cualidades
sin idealizarlo.
No
me atraen sexualmente mis amigos, la atracción intensa que siento hacia ellos
es meramente emocional, es expresión de mis necesidades emocionales y cariño
verdadero.
A los adolescentes los miro con mucho interés porque son la respuesta y salida
a mi conflicto afectivo, especialmente en el aspecto de la AMS; no tengo
fantasías sexuales con estos hombres, tampoco padezco obsesiones homoeróticas,
cuando los miro con interés erótico, el deseo sexual no es vehemente, y es
sentido con desagrado y extrañeza, siempre procuro interpretarlo y observar que
tensión del momento ha activado mis reacciones infantiles.
b. Relaciónate con tus iguales fijándote de no dar pie a ponerte
complaciente o asumir una actitud de payaso o actitud de superioridad para ser
aceptado. Muéstrate como realmente eres; si no lo tienes claro, actúa con calma
y piensa antes de decir algo si realmente es lo que tú quieres y piensas o
estás tratando de evitar un conflicto. A veces, por falta de práctica, es
difícil decir lo que deseas y piensas de manera adecuada: Habla calmadamente y
desde lo que tú piensas, sin acusaciones o interpretaciones hacia las cosas que
hacen o dicen los demás. Ejemplo: "A mi me parece que eso no es
correcto". Tienes que estar preparado para que los demás no están de
acuerdo contigo.
Actualmente
estoy libre de actitudes complacientes, nunca actué como payaso. En cuanto a
los sentimientos de superioridad, estos son más producto de fantasías de
autoadulación que del complejo de inferioridad y la autocompasión; es un hecho
que soy mejor que muchas personas en varios aspectos, pero no por eso soy un
ser superior, continúo siendo humano y no poseo una naturaleza de orden mayor,
así que estoy al mismo nivel de mis hermanos.
Generalmente
hiperdramatizo esas fantasías de autofelicitación, autoadmiración y carácter de
grandeza. Me comporto asertivamente con todo el mundo, así que no tengo
problema en expresar lo que pienso y lo que siento, salvo aquellas
circunstancias en que por estrategia es mejor adoptar una actitud pasiva
temporal. Procuro abstenerme de dar opiniones negativas o positivas sobre las
actitudes de los demás, lo primero que busco es comprender y sólo me atengo a
los hechos.
c. Si tus padres están disponibles para ti, intenta mejorar tu
relación con ellos, desde una mirada de adultos. No temas cortar las
manipulaciones de tu madre. Ella no dejara de quererte, pero pasarás momentos
incómodos que es importante superar. Con el padre, intenta conocer sus
intereses, demostrarle tu afecto aunque sea forzado y te cueste en un
principio.
Sólo
tengo a mi madre y ella no me manipula. Nuestra relación en mi edad adulta no
está marcada por la sobreprotección o la dependencia. Cuando dejé de culparla
por mis problemas y comprendí sus propias dificultades personales, llegué a
amarla de una forma más expresiva, y con el perdón brindado de corazón, cesó el
resentimiento inconsciente que experimenté hacia ella por varios años.
Siempre
estoy dispuesto a colaborarle en todo lo que pueda, quiero ayudarla a hacer
realidad sus sueños y deseo compartirle mi éxito en todo momento, también me
gusta escucharla y conversar con ella cuando dispongo de tiempo, en esas
charlas le comunico con frecuencia varios de mis planes.
Mi
madre me trata como el adulto que soy, pero se preocupa como lo hace cualquier
otra buena madre por la vida y salud de su hijo, y esa actitud la agradezco y
valoro mucho.
7.
REVISIÓN DE ESTA FICHA: APORTACIÓN PERSONAL A LA TERAPIA:
a. ¿Qué añadirías o quitarías
a esta ficha de trabajo para mejorar la terapia?
b. ¿Qué nuevas preguntas,
lecturas, artículos,… añadirías?
Nada.
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