Sebas
Considero a Sebas el mejor amigo de mi ciudad, y una de las personas a las que más quiero en este mundo, de hecho, es uno de los dos hombres hacia los que experimento un sentimiento de amor verdadero, y un deseo inmenso de felicidad para sus vidas.
Conocí a Sebas en el año 2010 cuando ingresó a la comunidad de ES POSIBLE LA ESPERANZA (EPE) con la intención de comprender la naturaleza de sus sentimientos de atracción hacia el mismo sexo (AMS) y de encontrar una solución a la problemática personal derivada de ello.
Desde el primer momento sentí que entre nosotros dos existiría algún tipo de conexión bastante profunda, como un designio del destino, un plan de Dios, o como desee llamárselo..., así que me interesé en él, y fui uno de sus primeros compañeros de terapia en la comunidad, y como ambos vivíamos en el mismo país, pues el interés se hizo mayor, ya que en la comunidad siempre fue muy usual que los miembros de los distintos países fuesen más cercanos entre ellos en razón de la misma nacionalidad.
En el mes de marzo del año 2011 nos conocimos en persona, y fue una experiencia inolvidable, muy constructiva para ambos, los dos recordamos ese día con gran cariño.
Desde ese momento continuamos viéndonos con poca regularidad debido a que surgieron una serie de dificultades propias de la neurosis que impidieron que se consolidase una amistad de trato personal permanente, sin embargo, nos mantuvimos en contacto a través de los medios virtuales, y a través de la comunidad de EPE.
A mediados del año 2012 nos separamos por un largo tiempo a causa de mi Trastorno Obsesivo Compulsivo y varias situaciones que enfriaron nuestra amistad... cada uno tomó su camino sin decir adiós, nos separamos en silencio, y le eché mucho de menos tiempo después.
Me enteré que había viajado al exterior a realizar estudios, y decidí volver a escribirle, pedir disculpas e intentar reanudar nuestra amistad; y Sebas me respondió positivamente, con mi mismo deseo de unir nuestras vidas a través del vínculo de la amistad otra vez.
Y desde ese momento me he mantenido en contacto con él, nuestros encuentros presenciales son ocasionales porque siguen existiendo barreras difíciles de remover, aunque ya no tanto como antes, y pues nos hemos unido más a nivel afectivo y espiritual.
Ambos compartimos la meta de superar la AMS, al igual que los sueños de una vida heterosexual, la construcción de una personalidad madura y los proyectos para alcanzar la libertad financiera; pero también me gustó mucho desde el principio su amor hacia Jesucristo, algo que noté genuino y muy interesante.
Como parte de la ayuda que nos brindamos para superar la AMS está el proyecto de realizar la terapia del cariño entre nosotros dos, como algunos saben, esta terapia consiste en brindarnos contacto físico mutuo para satisfacer en la mayor medida posible las necesidades homoemocionales que permanecen insatisfechas y que son el fundamento de la permanencia de los sentimientos de atracción hacia el mismo sexo.
No hemos podido realizar esta terapia porque carecemos de un lugar privado que nos brinde el espacio y la seguridad para poder abrazarnos, acariciarnos y sostenernos en brazos mutuamente con el fin de cumplir los deseos profundos y verdaderos de nuestro niño interior dejando totalmente de lado cualquier motivación sexual, al igual, que facilitar la comprensión y curación de las heridas emocionales que aún albergamos.
Su casa y la mía siempre permanecen ocupadas por nuestros parientes, lo que imposibilita efectuar este ejercicio; y como esta terapia debe ser ininterrumpida, no conviene tener un lugar para encuentros terapéuticos espaciados por diferencia de meses... si queremos que esto funcione necesitamos que sea algo continuo, diario si es posible, o al menos tres veces a la semana mínimo.
Así que estamos en la encrucijada de cómo resolver esto, pues el tiempo no es algo que favorezca la resolución de la AMS. Hemos pensado que la única manera de lograrlo es que uno de los dos vaya a vivir sólo, ya que viviendo sin la compañía de nuestros parientes podríamos disponer de toda la privacidad y el tiempo que se necesita para este tipo de terapia y para ejecutar otras del mismo orden.
La otra solución es ir a vivir juntos, alquilar algún lugar, y entonces todo podría ser más fácil, sin embargo, hay que esperar a que Sebas termine la universidad y empiece a ganar dinero por su profesión... esto tampoco esta lejos en el tiempo, pero sigo pensando que cuanto más rápido iniciemos este trabajo más rápido nos liberaremos de estos sentimientos indeseados de AMS.
Obviamente esta terapia del cariño forma parte de un trabajo posterior a un arduo y extenso trabajo previo de terapia conductual, congnitva, y de una reestructuración de la personalidad y los modos de vida. La fase de curación emocional para directamente resolver la causa primaria de la AMS sólo se puede alcanzar si ha mejorado significativamente la autoestima masculina y si se ha revertido una gran parte de la neurosis homosexual, porque de lo contrario, si ese trabajo no se ha hecho, los resultados no serán favorables.
El domingo pasado me vi con Sebas en un sitio campestre, y hablamos por horas como los grandes amigos que somos, le reiteré lo importante que él era para mi, y cuanto le amaba desde esa perspectiva de fraternidad y amistad verdadera, y nos comprometimos a resolver la AMS lo más antes posible, ya que honestamente, en esta ciudad en que vivimos, sólo nos tenemos el uno al otro, no hay más apoyo ni ayuda, ni más personas interesadas en el cambio de quienes tengamos noticia. Bucaramanga sigue siendo una ciudad ignorante en terapia reparativa de la homosexualidad.
Por lo pronto, estoy retomando con propiedad la terapia reparativa de la AMS, y procederé con todas mis fuerzas a solucionar este problema lo más rápido que pueda.
Comentarios
Publicar un comentario